Actualización y reforma integral para las zonas nobles de un hotel de propiedad familiar.
La intención del proyecto era darle un aire contemporáneo y actualizado, pero sin perder la sencillez y carácter fresco y luminoso de la isla de Ibiza.
Se ha querido huir de estridencias dándole paso a los materiales naturales como la madera de roble y fibras naturales como el yute y ratán y usar una paleta de colores neutros entre calizas y blancos. Con la intención de darle carácter personal al espacio, se estableció el color terracota tan típico en la decoración y arquitectura ibicenca como hilo conductor. Así pues, lo encontramos en los tres espacios en los que se ha divido el proyecto: recepción, patio y baños, aplicados en diferentes maneras.
Para el “coffe corner” se usó el color mostaza para dar un guiño más canalla que se ha extrapolado en los textiles.
El uso de una vegetación frondosa y elementos como lámparas de terracota manual, cierran el concepto adaptado planteado para estos espacios.
